El fuerte aumento en el precio del combustible generó malestar en el gremio de los taxistas.

Los fuertes aumentos en los valores de los principales servicios públicos que sufren los habitantes de la provincia tanto en agua, luz, gas natural, telefonía, combustibles líquidos y transporte, parecen que han tocado el fondo de los bolsillos el lunes cuando los propietarios de estaciones de servicios de GNC decidieron actualizar el precio del metro cúbico del gas natural comprimido, pasando de 6,46 a 9,69  pesos (3,23 pesos de suba) lo que llevó a que una carga de tanque lleno que antes costaba 49 ó 51 pesos, pasara a valer casi 80 pesos.

Los primeros en poner el grito en el cielo fueron los taxistas que esgrimen que dicha suba les representa unos 2.000 pesos de costo adicional por mes por lo que están dispuestos a enfrenar a las estaciones de GNC y bloquear los ingresos  de autos si no se analiza otorgar una tarifa diferencial para el sector. Sin embargo desde la cámara que nuclea a los propietarios de Estaciones de Servicios (CAPEGA) ya avisaron que si se bloquea una sola estación, cerrarán todas. Los sindicatos esperan una reunión con el ministro de la Producción y respuestas de las autoridades, ya sea para que se autoricen subsidios al combustible de los autos de alquiler u otra vía para paliar los aumentos de los costos.

“La respuesta al problema del precio del GNC para los taxistas y remiseros no la tenemos nosotros”, señaló Gonzalo Rodríguez, presidente de CAPEGA, quien aclaró que ya hicieron un esfuerzo para no trasladar todo el costo al usuario puesto que de lo contrario, el precio del GNC sería hoy de 11,50 pesos el metro cúbico.

Val aclarar que desde el 31 de marzo los combustibles en todo el país volvieron a aumentar un 6 por ciento, pasando por litro en pesos la Nafta Súper de  14,64 a 15,52; la Premium de 16,53 a  17,50; el Diesel Común de 13,32 a 14,12; y el Premium de 15,28 a 16,20.

El GNC históricamente costó la cuarta parte del precio de la nafta, pero en los últimos años los dueños de estaciones acordaron un precio único y llevaron el valor del gas a casi la mitad de la nafta, y ahora, en medio del descontrol de precios y tarifas reinante en el país, achicaran la brecha, a sólo 5 pesos.

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