La presidenta del Círculo Médico del Sur de Tucumán, doctora Adriana Frontini, rechazó con duros términos, en una nota enviada al titular de la Legislatura, Osvaldo Jaldo, la contratación de médicos cubanos para trabajar en la Argentina. “La decisión del Gobierno Nacional de traer a la Argentina más de doscientos médicos cubanos es, desde todo punto de vista, inadmisible ya que viola la ley además de ser innecesario que vengan”.

La facultativa médica escribió en la nota:

No consideró las especulaciones políticas que se han hecho en torno a esta decisión gubernamental pues se trata de aspectos que desconocemos.

Solo dijo que el halo de misterio detrás de la falta de una explicación coherente, torna razonable cualquier sospecha que vea en la medida adoptada fines diversos a los que aparentemente fundan el ingreso de médicos extranjeros, planteó en su nota.

La legislación nacional exige para ejercer la profesión de médico en la Argentina la obtención del correspondiente título universitario expedido por una Universidad certificada y en su caso el correspondiente título de especialista.

Respecto de los médicos graduados en el exterior, se encuentra legislado el procedimiento para la reválida correspondiente.

Además en las respectivas jurisdicciones provinciales es requisito para el ejercicio de la profesión la obtención de la matrícula ante las entidades a las que el estado les ha confiado el gobierno de la matrícula profesional.

La contratación masiva de médicos extranjeros sin ninguno de los requisitos previstos en la ley deviene por tanto inadmisible.

No cuestionamos ni la posibilidad de que médicos extranjeros ejerzan la profesión en el país ni su capacitación que habrá de evaluarse en cada caso particular.

Disentimos con la determinación del gobierno en cuanto no se exige el cumplimiento de los mismos requisitos legales que son exigidos a los médicos argentinos para poder ejercer la profesión, produciendo una situación de desigualdad ante la ley.

El gobierno nacional no ha justificado, en absoluto, cuál es la finalidad dee la decisión de traer médicos del exterior.

No hay insuficiencia de médicos – aclaró- ni por la cantidad ni por la calidad de la especialización profesional, por lo tanto no se entiende cuál es la razón de la medida adoptada.

Una medida tan excepcional requería una clara justificación puesta a la consideración de la ciudadanía y de la comunidad médica.

La contratación de médicos no habilitados legalmente pone en serio riesgo la calidad de la atención médica librada a profesionales sin garantía de formación.

Por lo demás tampoco ha expresado el Gobierno Nacional cuál sería el destino de los médicos extranjeros, es decir si se incorporarán al sistema público de salud y en su caso quién pagaría sus salarios, cuánto se les pagaría y si trabajarán bajo la dirección de las autoridades médicas ya establecidas o en forma independiente.

Resulta discriminatorio para los médicos argentinos que se permita el ingreso irrestricto de extranjeros a los hospitales públicos mientras que para los médicos argentinos tal ingreso al sector público no lo es.

Las autoridades de los diferentes servicios médicos del país vienen reclamando elementos de protección e insumos necesarios para hacer frente a la pandemia, sin que elEstado Nacional y los estados provinciales hayan dado una respuesta satisfactoria.

De allí que la asignación de recursos en la contratación de médicos extranjeros aparece, cuanto menos, como una medida desacertada y carente de justificación.

Es por ello que instamos a Ud. a velar por el regular ejercicio de la profesión y del principio constitucional de igualdad ante la ley, evitando el ejercicio profesional de aquellos que no cumplan con los requisitos legales en vigor.

 

 

 

fuente: contexto

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