“La llave que abría se quebró”: Presentación de un libro crucificado

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Por Martín Di Benedetto*. Devenir es una de mis palabras favoritas, que uso con mucho cuidado. En esta ocasión, sin tapujos, puedo decir que la presentación del poemario “La llave que abría se quebró” de la poeta tucumana María Belén Aguirre, devino en maravilla.

Una maravilla

Una maravilla asombra. Una maravilla despabila. Una maravilla conmueve y actúa de bisagra entre un antes y un después luego de contemplarla. Todo esto logró en el público el evento.

Comienza, de manera tradicional, con un breve diálogo entre la autora y el co-presentador, el poeta Jotaele Andrade. Y ahí nomás Andrade comienza a deleitarnos con el bisturí reflexivo con que leyó y analizó el libro.

La llave y sus interpretaciones

El poeta habló de la llave como objeto en cuestión, de su propósito siniestro occidental y de la mítica en la que se encuentra simbólicamente a la llave. La llave como pasaje entre la conciencia y el inconsciente.

La llave, como objeto que encierra y libera, abriendo y cerrando puertas, las puertas que, en este caso, son las del cuerpo de María Belén que apresan su espíritu en un cuerpo tembloroso, asfixiado y escandido, atravesado sólo por la libertad que la poesía supone, trascendiendo la existencia o inexistencia del pequeño objeto metálico.

Partes en que se quiebra el libro

Sorprendió a Aguirre la precisión con que Andrade desnudó el propósito de la disposición de los poemas del libro en tres partes: “El consuelo de los tontos”, “Serenas postales del temblor” y “La elegancia de desaparecer”.

Andrade, dice y deja atónita a la poeta, que “El libro se quiebra en tres partes, así como la llave que abría en tres partes se quebró”.

Juan Rosasco puso música y emoción

Una maravilla tiene continuidad y cadencia, y esta cadencia estuvo a cargo del músico argentino Juan Rosasco, que ejecutó con gracia y emoción las canciones “Tu revolución” y “Vías” acompañadas por el delicioso sonido del piano que habita la sala “David Viñas” del Museo del Libro y de la Lengua, donde la presentación tuvo lugar.

Juan Rosasco escribe sus canciones con un gran compromiso político y nos cuenta, entre canciones, de sus encuentros sublimes con algunas Abuelas de Plaza de Mayo. “Este encuentro es sagrado” concluye Rosasco al terminar de tocar “Vías”.

 

 

Los poemas leídos

Los poemas que leyó María Belén durante la presentación fueron: “Este es mi cuerpo, esta es mi tumba”, “Como en un río de Heráclito el cadáver de mi pez flotó”, “Tengo un don”, “Una mariposa aleteó en un pueblo perdido de la China y mi cuerpo tembló”, “Y no corrí como los otros”, “Donde dejé mi corazón” y “Una caída hacia arriba muy cansado”.

En sus poemas conviven el idilio y el deseo de autoaniquilación, la impasibilidad y la ausencia del amor. La poeta se pregunta, casi al comenzar el libro: “¿Puede una sola presencia suprimir el resto del Universo?” Y se responde, a continuación: “Puede. Ha podido. Está pudiendo”.

Una performance de amor genuino

Para finalizar la velada, María Belén Aguirre y el actor argentino Martín Aletta ejecutaron una conmovedora performance en la que ambos se entregaron al amor genuino: el rechazo, la aceptación y finalmente la complicidad.

Ambas actuaciones dejaron al público sin aliento. La performance fue ejecutada al son de “Path 17 Before The Ending Of Daylinght”, de Max Richter y de la canción “Ey”, del cantante y compositor mendocino Javier Montalto.

 

 

 

La presentación promedió con la proyección del poema “Gorila Koko” y culminó con “La elegancia de desaparecer”, ambas piezas audiovisuales  con edición del poeta y filósofo argentino y prologador del presente libro, Andrés Kirchner.

 

 

 

Finalmente, lo último que puedo describir es lo hermoso del libro como objeto. Con el arte de cubierta podemos ver una foto de Raymond Depardon (San Clemente, 1982) y cada segmento del libro, donde se lee el título de dicha sección, es acompañado por las hermosas fotografías de estalactitas de una caverna de Toulouse tomadas en 2016 por la cineasta chilena Daniela Garcías, quien además expuso parte de su obra en la sala.

Charla radial con el filósofo Néstor Luis Cordero

El convivio  contó con la presencia de destacados exponentes de la cultura argentina. Emotiva fue la recreación que del programa radial “La muralla y los libros” (Radio Nacional), hicieron María Belén y el filósofo argentino Néstor Luis Cordero (por estos días de visita en la Argentina), con la música de Juan Rosasco al piano ejecutando la citada y bella canción “Vías”.

Una maravilla desvela, acaricia, apuñala la mente y el espíritu. Esperemos que María Belén Aguirre siga quitándonos el sueño en futuras poesías, futuras presentaciones.

Próximas fechas

• Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, 5 de mayo a las 20.30, en el Stand Tucumán: María Belén Aguirre presentará “Los guantes amarillos”, del narrador tucumano Manuel Ernesto Rivas.

• Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, 10 de mayo a las 19, en el Stand Tucumán: Presentación de los tres últimos libros de MBA, a cargo del poeta Andrés Kischner. “Ubi sunt”, “Pater dixit” y el reciente “La llave que abría se quebró”. Música en vivo:  Juan Rosasco.

*Martín Di Benedetto, nacido en 1986, cantautor y poeta, trabajó como redactor en el diario “El Chubut”, de la ciudad de Puerto Madryn. Es autor del poemario “La lengua quemada”.

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