Valeria Khadija Collina vive en Bologna y se enteró el martes que su hijo era uno de los tres yihadistas que asesinaron a ocho personas e hirieron a decenas el sábado.
La madre de unos de los tres terroristas que el sábado por la noche mataron a ocho personas en Londres, el ítalo-marroquí Youssef Zaghba, dijo estar “avergonzada” por las acciones de su hijo y lamentó no haber podido alejarlo de las ideologías extremistas.
Valeria Khadija Collina vive en la ciudad italiana de Bologna y dijo a la prensa que su hijo la había llamado el jueves para lo que luego entendió era una “despedida”.
“Si bien no dijo nada en particular, podía escucharlo en el tono de su voz”, explicó al periódico italiano L’Espresso. “Bromeamos sobre cómo me recibiría en el aeropuerto de Londres cuando lo visitara al final de Ramadan”, agregó.
Al día siguiente Zaghba, quien al igual que su madre tenía ciudadanía italiana, dejó de responder a los llamados de su madre ni tampoco a los de su padre, quien vive en Marruecos.
El martes la policía antiterrorista italiana golpeó a su puerta para informarle que su hijo era uno de los tres terroristas muertos en el ataque en Inglaterra.
Collina dijo que desde entonces piensa en las víctimas. “Puedo entenderlo por mi tragedia personal, pero no tengo el coraje de comparar mi dolor con el de ellos. Es casi como si tuviera vergüenza de decir ‘también soy una madre, también sufro'”, relató.
En marzo del año pasado Zaghba fue arrestado en el aeropuerto de Bologna mientras intentaba viajar a Siria, diciendo que “quería convertirse en terrorista”.
La policía también encontró propaganda del grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) en su posesión, pero las autoridades italianas no hallaron evidencia suficiente para condenarlo. Sin embargo, lo catalogaron de “terrorista potencial” y compartieron esa información con las autoridades británicas.
“Él creía que Siria era un lugar para vivir de acuerdo al Islam más puro”, contó su madre, quien cree que su hijo se radicalizó en el Reino Unido por juntarse “con la gente equivocada”.
“Decía que a través de Internet le mostraban un sueño. Yo siempre le decía que no le mostraban las cosas horribles que hacían”, agregó.
“Desafortunadamente no fui capaz de cambiar su forma de pensar, cuando los hijos se equivocan los padres siempre sienten culpa. Pero hice lo mejor que pude y creo que él fue debilitado por dentro”, explicó.
Collina aseguró que dedicará su vida a luchar contra el yihadismo “enseñando el verdadero Islam a la gente y tratando de convencer a las familias de que llenen el vacío que puedan encontrar en sus hijos”.
“El ataque fue algo horrible, algo que no debería haber pasado y que no debería volver a pasar”, concluyó.
En el atentado del sábado los tres terroristas asesinaron a ocho personas atropellando y acuchillando, e hirieron a otras casi 50.
Fuente: Infobae