De pelotas con inscripciones para el 2023 y de las volátiles posibilidades de un intendente

—¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace rodeado de pelotas de fútbol? ¿Acaso se va a dedicar a entrenar jugadores?

—No, mi estimado. En mis pagos no puedo competir con el legado de Ángel Tulio Zof, Marcelo Bielsa o el más reciente, Jorge Sampaoli.

—A ese último ni lo mencione.

—Mire, con mi amigo Eliseo Trillini, estuvimos el día que dirigió subido a un árbol.

—¿En serio?

—Sipi. No lo ensucie por un fracaso.

—Está bien, Eduard. Pero qué fracaso…

—A cualquiera le puede pasar.

—Bueno, deje de dar más vueltas que perro pa´ echarse y largue la razón de todas estas pelotas.

—¿Acaso no ve que tienen la inscripción Noguera 2023?

—¡Tiene razón! Pero no dice que es a la Gobernación.

—Es que ni él mismo lo sabe.

—¿Por qué dice eso?

—Por lo que vinimos hablando ya desde hace tiempo.

—¿Sobre la candidatura de Juan?

—Justamente. El destino de los sueños de Noguera está atado a lo que decida el Jefe de Gabinete.

—Refrésqueme la memoria mi querido amigo.

—Mire, si Juan decide seguir a nivel nacional, el taficeño tiene que esperar que lo bendiga para acompañar a Jaldo.

—¿O sea que no le hace sombra a Jaldo?

—Ni a ganchos.

—Prosiga.

—Si Juan decide formar parte del binomio, se queda pedaleando en el aire y su destino estaría como candidato a legislador.

—Es una opción.

—Y si Juan decide ir al Senado, también tendrá que esperar su bendición.

—¿Y cuál es este juego?

—Ya se lo dije: ir por la máxima para pelear la segunda y rezar que suene el teléfono de Cristina pidiendo que lo incluyan.

—Ah, mire usted. ¿Y eso es posible?

—Con los líos que hay a nivel nacional no creo que las apetencias de un intendente del interior sean la prioridad ni para Cristina ni para Alberto.

—¿O sea que hizo bien en no ponerle candidatura a estas pelotas?

—Claro. Le pueden servir hasta para concejal.

—¿Quiere que hagamos Coca Cola a cabezazos con una de estas pelotas?

—Sipi, vendría a tono con los fernets con esa gaseosa que encargué a su cuenta y que ahí trae el mozo.

—¡¡¡Ya me jodió de nuevo…!!!

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