Don-Eduardo
Don-Eduardo

-¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace leyendo y marcando la página de clasificados? ¿Acaso busca laburo para usted, amigo?
-Usted está confundido mi estimado, yo soy un hombre honesto…
-¿Y eso qué tiene que ver?
-Que cuando encuentro un trabajo, lo devuelvo…
-Usted está bobina hoy, Eduard.
-Mire, no me venga con esos tucumanismos que no entiendo.
-Bueno, pero dígame, ¿qué está haciendo?
-Estoy buscando trabajo.
-¿Cómo? ¿Ya lo echaron de Diario Cuarto Poder?
-No, estoy buscando trabajo para dos que acaban de quedar desempleadas…
-¿Quiénes?
-La esposa y la hija de un ex intendente.
-¿De un ex intendente?
-Sipi.
-¿De qué ciudad?
-De una que en su nombre denota una linda panorámica, mi estimado.
-¿Bella Vista?
-Sipi.
-¿Finalmente echaron a la esposa e hija de Espeche?
-Sipi. Hoy firmó el instrumento dándoles el cese el actual intendente Sebastián Salazar.
-¿Es primicia?
-Sipi, información de primera mano.
-Pero, ¿para qué pierde el tiempo buscándole empleo a las chicas?
-Tiene razón, seguramente irán a acompañar a Espeche en el área de Interior.
-¿Usted cree?
-Más que creer estoy casi seguro.
-Bueno, saquemos estos diarios de la mesa entonces, que está muy desordenado todo.
-Sipi, así entra el desayuno ligth…
-¿Qué desayuno?
-El que usted me está por pagar.
-Pero, si solamente me contó un chismecito.
-Bueno, pero qué chisme…
-En eso tiene razón, marche un desayuno ligth. Pero cuéntese algo más.
-Tengo una bomba entre manos, pero quizá le dé miedo mi estimado.
-¿Por qué?
-Porque tiene que ver con un cementerio.
-¿De animales?
-¡¡¡No sea zopenco!!!

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