Después de que en estos días se viralizaran las imágenes del ministro de Cultura porteño, Enrique Avogadro, degustando el pasado sábado una torta que representaba el cuerpo de Jesús sangrante en el marco de una performance artística que tuvo lugar en la feria de arte FACA, el arzobispo de Buenos Aires, Mario Aurelio Poli manifestó ayer por la tarde su indignación en una carta dirigida al Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta. A última hora de este martes, el gobernante le dio la razón al sacerdote: “En lo personal, como creyente que soy, la actuación del Ministro de Cultura me duele”, escribió.

Poli es el sacerdote que presidió el tradicional Tedeum en la Catedral Metropolitana, el pasado 25 de Mayo, en presencia del presidente Mauricio Macri, su esposa, Juliana Awada y la plana mayor de ministros del gobierno nacional.

Después de señalar que el hecho del que participó Avogadro “podría haber pasado desapercibido si su significado y proyección no hubiese ido más allá de de una obra artística”, el arzobispo argumentó: “El Cuerpo de Cristo yacente es objeto de devoción y adoración por la mayoría de nuestro pueblo (…). El ministro no tuvo en cuenta el respeto a los hombres y mujeres que profesamos la fe de los cristianos.”

En otro de los tramos del documento enviado ayer al Jefe de Gobierno porteño, el prelado califica la acción del ministro como “un agravio al espíritu religioso, que no colabora con la pacificación anhelada de nuestra sociedad ni al debido respeto al ejercicio de las creencias”. Finalmente, Poli expresa su “profundo dolor y vehemente rechazo” ante la intervención de Avogadro y finaliza pidiendo al Jefe de Gobierno, en nombre de la comunidad a la que representa, “un juicio justo y público a nuestra demanda.”

Rodríguez Larreta se hizo eco de la carta y fue claro: “Debo decir que coincido con usted”, expresó. “Entiendo el malestar que todos los fieles atraviesan frente a un hecho que vulneró un tema tan central y dogmático para la fe católica”. Y más adelante: “También me sentí agraviado y sorprendido”.

Con todo, Rodríguez Larreta renueva su confianza en su ministro: “Creo en su genuino y sincero arrepentimiento, así también como en su voluntad de reparación”, le dice el Jefe de Gobierno a Poli.

Lejos de ser una expresión aislada, el enojo de Poli se vio reflejado en las manifestaciones espontáneas de miles de ciudadanos que por estas horas reúnen sus firmas en la plataforma Change.org pidiendo por la renuncia del ministro. Al cierre de esta edición, se habían manifestado unas 15 mil personas.

fuente. clarín

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