Premios Oscar: piden crear la categoría “mejor actuación canina”

Después de que se dieran a conocer las 10 categorías en las que contiende Roma en los premios Oscar, del director Alfonso Cuarón, miles de personas pidieron a través de redes sociales que también se le considerara a “Mejor Lomito” al perro que aparece saltando en el filme, a Borras.

Y a raíz de esta exigencia, una reconocida marca de croquetas se sumó al movimiento y dirigió una carta a la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas para pedir que abra una categoría especial en la que se reconozca el valor de los perros y los entrenadores de la industria del cine.

La misiva fue compartida en redes sociales e invitan a los amantes de los perros a sumarse a dicha campaña bajo el hashtag #Dogscar.

Puesto que actuar ya es considerado un arte, pero hacer que un perro actúe es un logro significativo, “los perros  también tienen que practicar varias horas antes de ingresar al set, al igual que todos los demás que reciben premios. Los perros pueden encender la esperanza con un solo ladrido, o quitarnos el aliento con un salto de fe” se lee en la carta.

Los perros son parte de la historia de sus dueños, y son capaces de inspirar emociones. “Hay una gran cantidad de perros y entrenadores que han sido galardonados con honores por rescatar a personas, por ayudar a los enfermos o por ir al espacio exterior. Por eso, solicitamos oficialmente abrir una categoría de premios para reconocer a los perros y entrenadores con inmenso talento y contribución en el arte de películas”, agrega.

Del abandono al estrellato, la vida del Borras antes de Roma

Recientemente se dio a conocer la historia del Borras, el perro que forma parte importante de la cinta que evoca la infancia de Alfonso Cuarón a través de redes sociales. En Facebook, la veterinaria que lo atendió compartió cómo de haber pasado sus días en un terreno baldío, ahora brilla como toda una celebridad y no sólo por ser parte del éxito de la cinta, sino por ser un perro rescatado.

Manuel Montero es el entrenador y encargado del perro. Él y su amigo Leonardo Serrano lo hallaron en la calle amarrado con un alambre a la pared de un terreno baldío, el Borras estaba a punto de morir de hambre y sed.

Estos hombres lo rescataron y lo llevaron a consultas, donde le encontraron pulgas, desnutrición, bronquitis agravada, infección en la piel por sarna, conjuntivitis y se encontraba casi en los huesos.

El can estuvo hospitalizado casi un mes, período en el que fue requerido para ingresar al filme de Alfonso Cuarón, y dado que el perro estaba un poco más animado y ya comenzaba a mover su cola y comer con más normalidad y comenzó a tener confianza en las personas, pronto podría seguir una vida normal.

Borras era tan parecido al perro que buscaba Cuarón para la película, y el reto era hacerlo rememorar al can que tuvo de niño. Enamorado de su pelota, fue como el Borras pudo dar los saltos que requerían sus escenas puesto que gracias a su juguete favorito se le reforzó el papel que desempeñaría frente el portón de entrada.

La larga batalla por crear un Oscar para el mundo animal

A pesar de que no existe una categoría como tal que premie el desempeño de los animales en una producción cinematrográfica, sí ha habido un perro que ha sido galardonado con la icónica estatuilla, pero no por su actuación sino por la decisión de su dueño, el verdadero ganador.

En 1985 la película “Greystoke: The Legend of Tarzan, Lord of the Apes” el perro de Robert Towne, el guionista acabó siendo nominado para el Oscar al Mejor Guion Adaptado en los premios de 1985, después de que éste exigiera que se acreditara a P. H. Vazak, su perro pastor húngaro, como quien lo había redactado. Así que fue el nombre del lanudo animal el que constó como guionista del filme tanto en los títulos como en los créditos.

El famoso terrier que participó en “The Artist” generó un movimiento conocido como “Consider Uggie” a través de las redes sociales para que también recibiera el galardón por su maravillosa actuación en la premiación del 2011, pero no sucedió nada, a pesar de que se esperaba que ese fuera el momento ideal para aperturar una nueva terna para reconocer el desempeño actoral de los animales.

Pero a pesar de los esfuerzos que se han hecho para otorgarles un reconocimiento especial en los premios más populares del cine, los miembros de la Academia se han negado a reconocerlos. Canes como el san bernardo de “Beethoven”, los Akitas que representaron a Hachiko, el Jack Russell Terrier que dio vida a Pancho en La Lotería, los collies que dieron vida a Lassie, los labradores que dieron vida a Marley, los terriers que encarnaron a Toto en “El mago de Oz”, y por supuesto otro san bernardo en Cujo, han quedado sólo en el reconocimiento del público.

Premios especiales para perros

La American Humane Association (AHA), que es la organización no gubernamental encargada de monitorear el trato que reciben los animales en las producciones cinematográficas, y que se encarga de colocar en los títulos la leyenda de “Ningún animal resultó herido en el rodaje de esta película”, decidió crear unos Oscar para el mundo animal, y el premio se otorga ya desde hace nueve años.

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