Trascendieron algunos números de la lucha contra el narcotráfico en Tucumán y no quedan dudas de hay una mora de la Justicia Federal de la provincia para avanzar en las pesquisas antidrogas. Los jueces en Tucumán se defienden: “Somos sólo 2 para atender la demanda de más de 1,5 millón de habitantes” y “no hay lugar para detención”.

En el organismo nacional hay un sistema de trabajo: Periódicamente, los máximos responsables del área de Seguridad reciben informes sobre cómo se están desarrollando las investigaciones que realizan los federales que luchan contra la actividad ilícita.

Gendarmería actúa

Por ejemplo, funcionarios de Gendarmería envían un listado de las causas que están investigando, cuál es su nivel de avance y en qué estado se encuentran. Les ponen un nombre clave (Carbón Blanco o Lluvia de cocaína, por sólo mencionar algunos), sin revelar ningún dato de los implicados (para evitar filtraciones). En ese escrito detallan en qué proceso se encuentra la pesquisa (confirmación de datos o seguimiento de los sospechosos) o en qué instancia está el expediente en tribunales (si está en una etapa de análisis o si esperan las órdenes de allanamientos para cerrar el trabajo).

Números en rojo

Y los números de la provincia estarían en rojo. Según se informó desde la Nación, sólo la Policía Federal espera que se le autorice a realizar unos 120 allanamientos. También se informó que la Dirección General de Drogas Peligrosas de la Provincia había solicitado autorización para realizar al menos 75 medidas que aún no se concretaron y reconocieron que les devolvieron alrededor de 35 expedientes para que profundicen las investigaciones.

Poviña sorprendido

El juez federal Fernando Poviña se mostró sorprendido por la información de Buenos Aires. “No tengo ninguna queja sobre el trabajo que realizo. Me llama poderosamente la atención porque las causas que tengo están trabajadas en tiempo y en forma, especialmente las que tienen detenidos”, explicó.

Faltan recursos humanos

El magistrado informó también sobre las limitaciones con las que se encuentran para tener mejores resultados. “Somos dos fiscales y dos jueces multifueros para atender la demanda de más de 1,5 millón de habitantes. A la falta de recursos humanos, que no superan los 20 empleados para atender este tipo de causas, se le debe agregar que ese problema también lo tienen los investigadores de la fuerza, que además no cuentan con los elementos apropiados para desarrollar su trabajo. Y hay otro inconveniente: no hay lugares de detención. Con el doctor (Daniel) Bejas hemos planteado esta situación hasta con cartas documento, pero nunca se nos respondió”, agregó.

Seguimos trabajando

Poviña descartó entonces que haya una mora en la Justicia Federal. “Pese a todas las limitaciones, seguimos trabajando en las causas que se nos presentan. Si hay demora en autorizar los allanamientos es porque las investigaciones no están bien culminadas”, concluyó.

2019 con sólo 11 allanamientos

El primer semestre del año está por terminar. Y los gráficos también se están tiñendo en rojo si se comparan con los números del año pasado. La Nación también analizó los números de la Policía Federal. Hasta ahora, realizó 11 allanamentos y detuvo a nueve personas. En 2018, se realizaron 45 medidas y se arrestó a 53 sospechosos.

La Digedrop, en cambio, en este primer semestre, tuvo unas 192 intervenciones, pero más del 90% fue por flagrancia, es decir, porque fueron descubiertos trasladando o vendiendo la droga en las calles. Los decomisos realizados por Gendarmería Nacional y la PSA también fueron por controles rutinarios. La unidad de la policía de la provincia que lucha contra el narcotráfico no realizó más de 20 allanamientos en estos casi 180 días de 2019.

La justicia provincial tiene más éxito

La Justicia ordinaria, en cambio, ha mostrado tener mayor éxito en los operativos antidrogas, pero en este caso, se podría decir que fue por casualidad. El Ministerio Público Fiscal cambió la política de investigación. Al crearse las fiscalías especializadas, los titulares acumularon causas y realizaron pesquisas más profundas.

Los resultados de ese trabajo se plasmaron en los casi 10 megaoperativos que realizaron en distintos puntos de la ciudad. Sólo en uno de los procedimientos realizados por la Policía y el Equipo Científico de Investigación Fiscal (Ecif) desarticularon quioscos dedicados a la venta de cocaína y marihuana. En otras palabras, fueron a buscar botines de robos, armas y prófugos, pero terminaron encontrando drogas.

fuente. lagaceta

Comments

Comentarios