El régimen de Maduro difundió que se trató de un intento de fuga masivo pero en realidad proliferan las denuncias de que fueron brutalmente reprimidos por exigir el ingreso de alimentos. Sólo en un país donde gobierna un dictador puede pasar esto y no tener consecuencias políticas. IMÁGENES PERTURBADORAS.

El motín comenzó pasadas las 13.00 hora local (17.00 GMT) de ayer, en el Centro Penitenciario de Los Llanos (Cepello), en Guanare, unos 500 kilómetros al suroeste de la capital venezolana, en el estado de Portuguesa. Hasta el momento se confirmaron 50 presos muertos, pero el número aumentará con el correr de las horas por el alto número de heridos que se ven en las impactantes fotografías del episodio. Hay, además 75 reos heridos y muchos de ellos en grave estado.

El Presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, aseguró que la masacre sucedió bajo el control y la responsabilidad de la dictadura que dirige Nicolás Maduro. “Mientras sigan usurpando funciones, la vida de todos los venezolanos corre riesgo”, dijo el presidente a través de su cuenta Twitter. “Hoy en Guanare vemos una nueva masacre en las cárceles de nuestro país bajo el control y la responsabilidad de la dictadura”, denunció el mandatario encargado.

La periodista Rosibel Cristina González señaló que el motín ocurrió en una zona del penal conocida como La Tela, dominada por un líder criminal conocido como “Olivo”.

El Observatorio Venezolano de Prisiones, una ONG que monitoreo el estado de las cárceles en el país, también se refirió a la situación como una “situación irregular”. La directora del observatorio, Carolina Girón, ha pedido una investigación exhaustiva para aclarar lo sucedido, tras una “dudosa” primera versión de las autoridades, por la que los presos intentaron fugarse “a plena luz del día”.

Según la ONG, la cárcel está sobrepoblada: en ella hay recluidos 2.500 presos cuando su capacidad habitual es de 750, y son “víctimas del hacinamiento y la desidia”.

fuente: infobae

Comments

Comentarios