A las 7,25 de la mañana (cinco horas menors en la Argentina) el presidente argentino Mauricio Macri descendió del automóvil que lo llevó hasta el hotel De Russie, donde se alojará con su familia y la comitiva, y entró en el albergue con su pequeña hija Antonia en brazos.

Detrás entraron su esposa Juliana Awada y su hija del primer matrimonio con un conde belga, Valentina, de 13 años. La hija mayor de Macri, de su primera esposa, reside en Italia y tambien participará del encuentro del sábado a la mañana con el Papa Francisco. Solo el embajador argentino en Santa Sede, Rogelio Pfirfer formará parte de la comitiva.

Mauricio Macri sale del hotel para ir a almorzar junto con su esposa Juliana Awada hija Antonia y la de Valentina. Foto: Víctor Sokolowicz –

En el avión de Alitalia en el que viajó el presidente vino también su comitiva, encabezada por la canciller Susana Malcorra; el secretario de Asuntos Estrtégicos, Fulvio Pompeo y el secretario de Culto, Santiago de Estrada.

El portavoz presidencial, Ivan Paolosky, esperó a Macri en la puerta del lujoso albergo, pues llegó como adelantado de la comitiva argentina hace dos días. El tradicional hotel De Russie se encuentra en la central vía del Babuino de Roma, a pocos metros de la piazza del Popolo.

Esta mañana existía incertidumbre respecto a las actividades programadas en la agenda presidencial. Hoy y mañana se reunirán el el hotel Meliá los embajadores argentinos acreditados en los países europeos. Se previó que el presidente les hable pero no se sabe con exactitud si esto ocurrirá hoy o mañana por la tarde.

Lo mismo ocurre con la cena que el primer ministro italiano Matteo Renzi ofrecerá al presidente y su esposa, que tendría lugar en Florencia. Renzi fue alcalde de la capital del Renacimiento italiano y con Macri son buenos amigos.

Fuente: Clarín

Comments

Comentarios