Los asaltos a mano armada crecen en la provincia. Los delincuentes salen armados a robar motos, celulares y todo tipo de cosas sin importar ir preso y terminar muertos. Usan armas de fuego y muchos tienen antecedentes penales. Las víctimas tienen que agradecer seguir vivos. Ayer hubo varios arrestos.
El primer caso fue el de un adolescente de 18 años que robó y minutos después fue reducido. Otros tres delincuentes fueron interceptados por policías cuando intentaban huir en una moto (iban armados), dos de ellos fueron detenidos en el barrio Alejandro Heredia. Finalmente un sujeto fue aprehendido a la salida de un evento deportivo.
El primer caso ocurrió a las 6 de la mañana, cuando un joven de 18 años fue aprehendido tras cometer un robo en Crisóstomo Álvarez al 3000. El adolescente junto a otro sospechoso que logró huir, habían robado el teléfono celular y la billetera de un hombre bajo amenazas.
Cerca de las 10.30, Motoristas Capital de Comisaría Seccional 4° divisaron en la autopista a la altura del Supermercado Emilio Luque a tres sospechosos en una moto que, al ver la presencia policial intentaron escapar. Sin embargo pero alcanzados y reducidos en el barrio Alejandro Heredia, dos de ellos, mientras que un tercero escapó a la carrera. Entre las ropas de los detenidos encontraron un arma.
Los jóvenes de 20 y 23 años fueron trasladados a la dependencia policial y secuestraron la moto que sería robada.
Finalmente, efectivos de la División Delitos contra la Propiedad cerca de las 16, descubrieron a dos hombres que circulaban en un moto con un arma de fuego en intersección de las calles Bolívar y Pellegrini. Al ordenar que se detuvieran, se dieron a la fuga. Los policías vieron en la persecución que el acompañante soltó un arma de fuego. Intentó esconderse entre una multitud de hinchas de San Martín, pero estos, al notar que era perseguido por policías, lo redujeron y lo entregaron a los policías.