Por Manuel Rivas* / Letras de Fuego / Noticias. Como dijo Martín Kohan en la inauguración de la 47ª Feria Internacional del Libro, “la Feria es un vocerío”, pero dentro de esa maraña de voces se alzaron las de los tucumanos asociados a la SADE.
Firma de ejemplares y contacto con lectores
Los tucumanos estuvieron más anfitriones que nunca este viernes, aunque hoy será el Día de Tucumán. Encabezados por su presidente, Alejandra Burzac Sáenz comenzaron a calentar los motores en la comodidad del stand de la SADE.
En ese lugar emblemático, los autores tucumanos realizaron la firma de ejemplares, y tuvieron quizás lo más importante de un evento de esta magnitud: el contacto con los lectores y su curiosidad.
Participaron de esta actividad Teresa María González, Elba Susana Juárez; Marcelina Pérez de De Haro; Alejandra Burzac Sáenz; Manuel Ernesto Rivas; Romi Carrizo; y Patricia Mora.
Las presentaciones
Los asociados de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE) Filial Tucumán, abrieron el fuego con la narradora oral Olga Martínez, quien deleitó con un relato sobre la Laguna del Tesoro y el toro con cuernos de oro que la habita.
Luego fue el turno de Elba Susana Juárez quien presentó su “Charla sobre Metafísica”, en donde desplegó los conocimientos específicos de esa atrapante especialidad y cosechó los aplausos del público en el stand de la provincia de Tucumán.
Luego fue el turno de la escritora de Alpachiri, Patricia Mora, quien presentó su libro “Mujeres de agua”, obra que recorre tiempos pasados y presentes en la piel de mujeres construidas desde un basamento real.
El “Chuli” Rodolfo Vargas Aignasse, eterno
Uno de los momentos de mayor emoción fue la mesa de homenaje retrospectivo al escritor Rodolfo Vargas Aignasse, recientemente fallecido, a cargo de las escritoras Alejandra Burzac Sáenz, Marcelina Pérez de De Haro e Hilda Angélica García.
La titular de la SADE Tucumán abrió la charla con una curiosa anécdota del encuentro entre el autor de “La Revolución Inconclusa, Felipe Varela El Quijote de los Andes” y Gabriel García Márquez, que inició al catamarqueño en la escritura.
Vargas Aignasse inició el diálogo al afirmar que ambos coincidían en que el nombre de sus pueblos tenían sólo letras “a”, Aracataca y Andalgalá. Esa afirmación fue el pie para la charla y el consejo de dedicarse a la escritura del Nobel colombiano.
Desde ese momento, se sucedieron muchos libros que lo convirtieron en un escritor con estilo propio y una impronta por el rescate de personajes históricos cuyas vidas reconstruyó de manera novelada.
La referencia a la obra de Vargas Aignasse se repartió entre las escritoras de la mesa, de un modo articulado y abarcando aspectos especiales en torno a su producción. El aplauso final fue el corolario de una mesa amena que cumplió la meta del homenaje.
La poesía sanadora de Teresa González
Finalmente, fue el turno de la autora bellavistense, Teresa González, quien presentó el libro “Una fuente de agua mágica”, dedicado a su pequeña nieta, que logró superar un problema de salud. La poesía sostuvo a la autora en esos delicados momentos.
La emoción no había abandonado el stand de Tucumán, y la escritora tuvo instantes en los que un nudo en su garganta le impidió, por unos largos segundos, proseguir con la lectura, que emocionó a todos los presentes.
También leyó poemas de su libro “Una lágrima al corazón”.
La escritora Alejandra Burzac Sáenz, quien fue su presentadora, hizo ameno el encuentro, porque además de referirse a la autora y su obra, le hizo una mini entrevista que desplegó mucha más información para el conocimiento de la autora.
La SADE Tucumán brilló y genera más expectativa para las actividades que tiene por delante, incluido el Encuentro Regional de Poetas del NOA, con participantes de Catamarca, La Rioja y Tucumán. La mesa de la excelsa Literatura está servida.
*Director Diario Cuarto Poder, profesor de Letras e Historia, periodista y escritor.