Se jugaban 25 minutos del primer tiempo y Juventus le ganaba por 1 a 0 a Sampdoria en Génova, cuando Paulo Dybala se detuvo en las cercanías de la mitad de la cancha, se derrumbó en el piso, pidió el cambio y, entonces, se encendieron las alarmas del cuerpo técnico de la Selección Argentina, en la previa de la doble fecha de las Eliminatorias Sudamericanas.

Antes de dejar el campo de juego, Dybala se bajó la media de su pierna izquierda y le dijo a su compañero Cuadrado: “Se me puso duro”. La buena noticia es que el argentino dejó la cancha caminando.

Edgardo Bauza ya tenía la dupla de ataque para jugar el próximo jueves ante Chile en la cancha de River: Dybala-Higuaín. Pero este imprevisto, sin dudas, podría modificar el plan inicial del Patón.

Antes, claro, habrá que ver qué tipo de lesión tiene el delantero que surgió en Instituto y ahora brilla en Juventus. y de acuerdo al diagnóstico se determinarán los pasos a seguir.

En caso que Dybala no juegue, su lugar podría ser ocupado por Lucas Pratto, el punta que repareció ayer tras una fractura en la nariz y jugó los 90 minutos para San Pablo frente a Ituano. Y el otro centrodelantero convocado por Bauza es Sergio Agüero.

Las hipótesis vuelan y la pregunta cae de maduro. ¿Será ahora el momento de llamar a Icardi? ¿Bauza buscará un reemplazante en el fútbol local? Habrá que aguardar el comunicado oficial de Juventus para determinar los pasos a seguir.

Fuente. Clarín

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