Sacaron un comunicado en defensa del camionero y de Víctor Santa María, jefe de los porteros. Ambos son investigados por la Justicia.

Fue un socio clave de Néstor Kirchner y luego un enemigo público de Cristina Kirchner. Ahora, Hugo Moyano, cuando la lupa se posa sobre el presunto desmanejo de los fondos de su gremio, consiguió un respaldo inesperado: La Cámpora, la agrupación que comanda Máximo Kirchner, salió a defenderlo.

Un informe de la Unidad de Información Financiera detectó pagos por mas de $ 200 millones entre el gremio Camioneros y las empresas de la familia Moyano.

Desde su site, www.lacampora.org, acusan al gobierno de intentar “doblegar” a los dirigentes sindicales que presentan resistencia a las políticas promovidas desde la Casa Rosada. Refieren, en particular, a Moyano y a Víctor Santa María del Suterh.

En la defensa de esos sindicalistas, desde la agrupación preferida de la ex presidente, hablan de “filtraciones selectivas” de datos que provienen del Régimen de Sinceramiento Fiscal, que fue promovido por el actual gobierno y del que, dice el descargo K, “participaron personas muy allegadas al propio presidente, como su hermano Gianfranco y su amigo Nicolás Caputo”.

“Con el objetivo de intentar doblegar a aquellos dirigentes que presenten algún signo de resistencia a las políticas de ajuste contra la clase trabajadora, Mauricio Macri ha dado la orden de impulsar una serie de aprietes públicos contra referentes sindicales, recurriendo a la publicación de datos que, por definición, no pueden hacerse públicos”, sostiene el comunicado.

“Tal como ocurrió con el dirigente Víctor Santa María durante el fin de semana, ahora le tocó a la familia Moyano”, indica el comunicado de La Cámpora y agrega que un “informe” (sic) de la Unidad de Información Financiera (UIF) sobre las cuentas que abrieron los hijos de Liliana Zulet, esposa de Hugo Moyano, para ingresar al Régimen de Sinceramiento Fiscal”.

En la misma línea, sostiene que “dieron a conocer el contenido de las mismas, y bienes que han sido debidamente incluidos en sus respectivas Declaraciones Juradas (lo cual no constituye delito alguno, pero en aras de difamar a la gente todo suma)”.

La relación entre La Cámpora, como brazo político más cercano a Cristina, y los Moyano tuvo sus vaivenes. Facundo Moyano tuvo, apenas murió Néstor Kirchner, una relación de cercanía con Máximo y la cúpula de la agrupación pero luego se distanció.

También se rompió el vínculo entre Moyano padre y Cristina. El jefe camionero, por entonces jefe de la CGT, abandonó el PJ y se convirtió en uno de los primeros peronistas críticos apenas la ex presidente asumió tras lograr el 54% de los votos. En la misma línea se movió Pablo Moyano.

Pero el año pasado, Pablo -que maneja en la práctica Camioneros- llamó a votar contra Macri y a favor de Cristina. Y a fin del año pasado participó de la interna del PJ bonaerense junto a Gustavo Menéndez y se convirtió en uno de los vicepresidentes del partido que más de un lustro atrás tuvo a su padre como presidente.

fuente: clarín

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