Actualidad / Entrevista / Por Hipólito Alvarado*. Cuarenta y cinco ex alumnos de ese establecimiento educativo de Aguilares regresaron a las aulas en donde vivieron la felicidad de aprender. Donaron Banderas de Ceremonias y Provincial.
El día Lunes de 23 de junio en la Escuela Libertador San Martín, de la ciudad de Aguilares, ex alumnos volvieron a visitar los espacios y las aulas de su ex escuela, pero con un noble propósito, que fue el de donar dos banderas al establecimiento; una de flameo y una de Macha de ceremonia.
Ese día pudimos hablar con una de las ex alumnas promoción 1985, quien emocionada nos dijo:
—Hola soy Laura Mendoza Villavicencio, y la verdad es que esto sucedió de forma espontánea. Todo se inició con un armado de un grupo de WhatsApp, y se fueron agregando, hasta que nos dimos cuenta que estábamos los 45 ex compañeros, y de pronto, se nos ocurrió que debíamos hacer algo por nuestra exescuela, y allí germinó la idea de donar dos banderas, una de flameo y otra de ceremonia de la bandera principal que no es otra que la de Macha. Nos dimos cuenta que era una forma emocionante revivir, aquel antiguo juramento que también nosotros hicimos de lealtad a la bandera. Los impulsores de este grupo de WhatsApp fueron a parte de mí, Angelita Abaca, Adrián Reynoso y Miguel Rivas.

Hipólito Alvarado (H.A.): —¿Cómo fue volver a entrar a la escuela después de tantos años?
Laura Mendoza Villavicencio (L.M.V.): —Fue un momento mágico, sobre todo porque entramos, no por la puerta donde los hacen los alumnos, sino por donde entran los docentes. Fue muy emocionante recorrer las aulas, los pasillos, las galerías y claro está también el patio. Claro que el edificio cambió bastante para mejor, pero la emoción fue muy intensa, y con el regado de encontrarnos con los compañeros, con los cuales, nos hablábamos por las redes y por WhatsApp pero que de vernos de frente, hacia nos que muchos no nos veíamos.

H.A.: —¿Qué te inspiró para decir las palabras que emanaron de tu discurso?
L.M.V.: —Me inspiró la nostalgia, el afecto que tengo por mi escuela, y por la educación pública, y claro el sentir que se tradujo en mis palabras de agradecimiento. Y para colmo después nos agasajaron con una merienda de por más generosa. Debo aclarar, que cuando los alumnos juraron la Bandera, volví y creo, que volvimos a sentir el estremecimiento, que sentimos de niños en un acto tan esencial y fundamental. Quiero remarcar que este acto de donación fue posible por la generosidad de la Fundación Bicentenario que tanto hace por promover y difundir, nuestros símbolos patrios y a su Presidente Jorge Atilio Mendía, que tanto hace por nuestra historia y por nuestros símbolos patrios. La Fundación del Bicentenario nos donó las escarapelas y los pins que les regalamos a los niños. Recordé en mis palabras a mi maestra de ese año del Juramento, Teresa de Barquet y al Profesor de Educación Física Carlos Rivadeneira.

H.A.: —¿Invitaron a la prensa local y a las autoridades?
L.M.V.: —Si lo hicimos, entendiendo lo importante que es este acto, para los alumnos de la escuela y para toda la comunidad educativa, pero, quizás no tuvieron tiempo, o para ellos había asuntos más importantes. Pero creo que estuvimos quienes debíamos estar.

También Angelita Abaca, otra de las ex alumnas del establecimiento y parte de la promoción 1985 nos dijo:
Angelita Abaca: —No puedo hablar mucho la emoción me impide articular las palabras, pero creo que volver, visitar los lugares que nos ha dado tanto, como esta escuela nos dio, es como abrazar su historia y tu alma.

A su turno, Adrián Reynoso nos comentó: —No puedo creer que haya pasado tanto tiempo, siento que fue ayer que venía a la escuela.
Tuvimos también la oportunidad de hablar con la Directora del establecimiento la Sra. Patricia Chazarreta, quien nos contó lo emocionada que estaba, con este retorno de los ex alumnos, y con la donación de las emblemas patrias.
Además de la emoción de que la glosa que acompañó el acto de donación, fue escrita por el poeta y escritor Daniel Posse, oriundo de Aguilares, quien generosamente escribió para este acto, con la consideración de que él no fue alumno del establecimiento, pero que tanto afecto tiene por su ciudad y por la promoción 1985, que decidió hacerlo.
La Glosa que escribió Daniel Posse para este solemne acto:
EL EMBLEMA DE LA PATRIA TUCUMANA
Hay un rumor en la tierra,
las alas del viento
hacen un eco de emblema a la patria.
No alcanzan los colores de la madre tierra,
en azul y blanca,
por eso desde el cerro hasta el horizonte,
resurge la bandera de Macha.
Parecen iguales, en una habita el sol,
en la otra el azul en una sola franja.
Pero es que el sol lo tenemos,
extendido de norte a sur,
de este a oeste,
en la yunga, en los ríos, en los cañaverales,
en los cuerpos de nuestra a patria tucumana,
en los cantos de la zafra.
El clamor de los azahares, de los limoneros,
elevan su canto en una fanfarria.
¡Como no jurarte lealtad bandera de Macha!
Hoy hay una legión,
que viene del ochenta y cinco,
son cuarenta y cinco voces,
las que en un canto de silencios,
te proclaman.
El patio de la escuela se estremece,
llevando el nombre del padre de la patria.
Hoy flamean las dos banderas azules y blancas,
la de la patria grande y la de la tierra tucumana.
Daniel Posse


