La gestión de Roberto Sánchez denuncia un “Concejo Deliberante paralelo” para no cumplir con el acuerdo por el que la provincia les paga el sueldo a 110 empleados. Los ediles propondrán la incorporación de estas personas al Poder Ejecutivo municipal para zanjar la polémica desatada entre ambos poderes del municipio.

Quieren borrar con el codo lo que firmaron con la mano. En noviembre de 2015, el intendente de Concepción, Roberto Sánchez, se encontraba en una difícil situación, con la intendencia quemada y jaqueada por los empleados que había echado. En ese momento, tuvo que intervenir la provincia para garantizar la paz social. El resultado de esa intervención fue que 110 empleados reciben desde entonces sus salarios desde la gestión provincial. Sin embargo, un conflicto desatado entre el Gobierno de Sánchez y el Concejo Deliberante, pone en discusión la suerte de esos empleados, que hasta el presente venían cobrando en la sede del cuerpo legislativo municipal. Las presiones del municipio sobre el otro poder, para que aprueben a libro cerrado la autorización para gastar 300 millones de pesos, fue subiendo la temperatura y desató el conflicto. Es por ello que el concejal Sergio Castillo salió al cruce de estas maniobras y anticipó que la semana próxima elevarán un proyecto por el cual los mencionados empleados serán derivados a la planta permanente de la Municipalidad de Concepción, teniendo en cuenta la existencia de alrededor de 1000 empleados en negro, que la gestión de Sánchez tendría en el municipio, lo que destruye las argumentaciones de no poder sostener una gran cantidad de empleados, utilizada en medio del conflicto en noviembre de 2015. Castillo explicó que el dinero con el que se abona los sueldos de los mencionados 110 empleados, es retirado por el Gobierno municipal y trasladado a la sede de la Protesorería del Concejo Deliberante, en donde pasan a cobrar. Señaló que son unos 6.000 pesos para cada uno de ellos. También desestimó las denuncias sobre cobros parciales e instó a aquellos que conozcan de este tipo de situaciones a denunciarlas públicamente. Consideró además que el pase a la planta permanente municipal posibilitará que sean bancarizados y que tengan todos los beneficios que tienen los empleados municipales de la “Perla del Sur”.
De esta manera, esos 110 empleados fueron tomados como una herramienta de presión sobre los concejales, quienes sostuvieron que es el gobierno concepcionense el que tiene que dar explicaciones sobre la gran cantidad de empleados en negro que se han generado en lo que va de la gestión.

De parte del legislador Chebaia
Las denuncias del concejal Castillo fueron más allá, al señalar que entre los empleados en negro designados por Sánchez, en contraposición con la austeridad que pregona, perciben sueldos personas que no son de Concepción. “Ante una pregunta, yo mismo les indiqué dónde quedaba la Tesorería del municipio, y me dijeron que venían de parte del legislador Rubén Chebaia”, expresó en diálogo con Diario Cuarto Poder.
“Quien les paga es el tesorero Juan Comaschi”, subrayó el concejal, quien también agregó que en la ejecución presupuestaria figura la compra de 12 computadoras por un monto de 12 millones de pesos. “Deben ser las computadoras más caras que he visto desde que tengo uso de razón”, ironizó.

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