Letras de Fuego / Entrevista / Por Manuel Rivas*. Entrevistamos a uno de los mejores poetas de su generación, el santiagueño Aníbal Costilla, quien participó activamente del 1º Encuentro de Poetas del Norte Grande, realizado recientemente en La Rioja.

—¿Qué sensaciones te deja este 1º Encuentro de Poetas del Norte Grande?
—Estoy feliz de poder compartir. Fue un gran sacrificio llegar hasta aquí. Hicimos muchos kilómetros, pero valió la pena el viaje, el esfuerzo y poder encontrarnos con tanta gente querida, con tantos poetas admirados, poetas que ya tienen un camino y otros que están iniciando. Reunirnos en La Rioja nos llena el corazón, nos llena de nuevas expectativas y de nuevos proyectos. Encontrarnos siempre es compartir no solamente la palabra en estas mesas, en los encuentros en las lecturas, sino también compartir el afecto, el cariño, el abrazo que es siempre necesario.
—¿Cuál es el balance que haces de las actividades realizadas?
—El balance es muy positivo, me voy muy contento. Agradezco muchísimo la invitación de Adriana Petrigliano, que se puso al hombro todo este evento, este 1º Encuentro de Poetas del Norte Grande. Esto es un aliciente para seguir produciendo, escribiendo, y en algún momento editar lo que estamos escribiendo.
—¿Se ha generado un hermanamiento fuerte entre los poetas del NOA y NEA?
—Sí, no solamente el norte estuvo presente sino también de otros lugares, como María Casiraghi, que viene de Buenos Aires y que está emparentada con la provincia de Salta, principalmente por su unión con el “Teuco” Castilla, pero también todas las provincias del Norte estuvieron muy bien representadas. También escuchamos a una correntina que parece que tiene una voz muy particular y muy interesante dentro del panorama actual de la poesía argentina. Le comentaba a Estefanía Ceballos que me sentí muy identificado con su lectura, con la fuerza, con el modo en que lee, con esa capacidad de plasmar en unos cuantos versos toda una visión sobre la sociedad, los recuerdos, los afectos, el futuro también, y que no solamente vivimos del presente, sino que también comenzamos a dar los pasos hacia el futuro, porque ya en este momento todo lo que te dije es pasado.
—¿Qué te presenta ese futuro?
—Esta expectativa de poder vivir acompañados, participar de nuevos encuentros y encontrarnos, que la poesía nos una, nos siga uniendo, que me parece es un objetivo a cumplir. Dentro de poco vamos a estar en Tucumán, en el FIDEO, Festival Intergaláctico de Escritores Oficial. Nos ha invitado Daniel Ocaranza, Zaida Kasab, así que seguramente estaremos presentando “Paisaje Rasante”, que es la antología que Euloquio Rojo del Jardín ha convocado y que nos ha unido a varios escritores del Norte como Marcelo Sutti, de Salta; Víctor Aybar, de Catamarca; Adriana Petrigliano, de La Rioja, y en mi caso, de Santiago del Estero. Estoy feliz por lo que estamos haciendo, por la actualidad que vivimos como escritores, poetas y por el futuro que se viene, que espero que Dios nos ayude a concretar todos estos proyectos.
—¿Cuáles son los proyectos personales de Aníbal Costilla?
—Estamos en el proceso de edición de un libro con Editorial La Papa, con Pablo Donzelli. Vamos a publicar mi primera novela. No quiero develar mucho, pero es una novela a la que le tengo mucho cariño. Es mi primera novela y he notado en Pablo un entusiasmo muy importante en el sentido de que ha tomado la decisión de publicarla. En ese caso, me parece que, si ha despertado interés en él, seguramente lo hará en los otros lectores, porque considero que Pablo Donzelli es un gran lector, aparte de escritor y editor.
—¿Las raíces de tu tierra son una característica propia de tu poesía?
—Pienso que sí, uno escribe, primero y principal, sobre lo que tiene delante de sus ojos. El paisaje está presente en todo momento. Todos los escritores tienen algo delante suyo y eso es característico, el hecho de apropiarse primero del lugar en donde uno se encuentra, tratar de mirarlo desde todas las aristas, desde todas las perspectivas, hacer abarcativa esa mirada, me parece que es una tarea esencial del poeta y después tratar de trascender ese propio lugar para llegar a otros y poder de algún modo entrar en comunión con esos otros lugares que, por ahora, son desconocidos, pero que poco a poco uno empieza a vislumbrar nuevos encuentros, nuevas salidas, nuevos puntos de contacto, en otros lugares, con otra gente, con otras formas de ver la vida, con otras culturas, así que me parece muy interesante y creo que sí, como te lo dije al comienzo, me parece característico en mí, la presencia del río, de la infancia, de los sentimientos familiares, sobre todo.
—¿Qué se siente venir del interior del interior y ser uno de los referentes nacionales en cuanto a poesía?
—Te agradezco mucho esa consideración. Tu pregunta me lleva al recuerdo del año 2007, cuando publiqué mi primer libro, que se llama “Mojonerías”, presentándolo en la Casa Castro de Santiago del Estero, en la Subsecretaría de Cultura de la provincia representada en ese momento por el arquitecto Rodolfo Legname. Después de haber pasado tanto tiempo, creo que he conseguido transitar un camino que me hizo muy feliz, y que me dio muchas satisfacciones. En el camino fui encontrando mucha gente valiosa de las cuales aprendí muchísimo y de las que espero seguir aprendiendo. No sé si soy un referente a nivel nacional, pero considero que el camino que he recorrido lo he hecho con mucho goce, con mucha satisfacción y mucha alegría. Estar hoy en este encuentro y venir del interior del interior como decías vos, es un gran desafío, un gran sacrificio, pero también es una gran felicidad. En resumidas palabras, estar aquí hoy es un logro personal porque he tenido que vencer sobre todo cuestiones de salud que en un tiempo atrás no me permitían hacer este tipo de viajes, y hoy estoy aquí y eso para mí es una gran alegría y pienso que es un objetivo cumplido, un paso más en mi vida, no solo poética, de escritura, sino que también personal. Me da muchísimo orgullo de mí mismo, haber podido superar esta prueba de viajar tantos kilómetros para estar aquí, después de haber sufrido un trastorno de ansiedad bastante complicado, con ataques de pánico y que hoy, estar delante de este público maravilloso, de este público selecto, leyendo mi poesía me llena totalmente de felicidad.
—¿Puedes contarnos algo sobre la iniciativa de Mi aporte a que el puerto no importe?
—Ese trabajo lo tomamos con mucha responsabilidad. Es una ardua tarea publicar a poetas en sus comienzos, a poetas del norte y ahora a poetas de Cuyo. Es una enorme satisfacción poder convocar a los poetas, hacer un trabajo de curaduría, y luego darlos a conocer, difundir toda su obra en la fan page de “Mi aporte a que el puerto no importe”, que es una iniciativa que surge de Pablo Donzelli en la Feria del Libro de Salta del año 2019, junto con Jimena Vera Saró conversando sobre las limitaciones de la difusión de la poesía del Norte y la centralidad, la importancia que tenían las grandes ciudades en donde se producían los grandes movimientos poéticos, en donde se difundían las obras de los artistas y de los poetas más importantes del país. Pablo Pensó en su momento que era una buena iniciativa dar a conocer a los poetas del Noroeste Argentino y bautizó a esa fan page como “Mi aporte a que el puerto no importe”, publicando un poema mío en esa oportunidad, y luego empezó a publicar, una vez por semana, a poetas de distintas provincias del Noroeste. Luego me sumó a mí como uno de los curadores. Después llegó Mario Flores, por Salta, después Marx Bauzá por Tucumán. Más tarde, nos dejó Jimena Vera Saró, que estaba a cargo de las publicaciones de La Rioja, y en su reemplazo la tenemos a Marta Clara, que está llevando adelante un gran trabajo. Y por Jujuy, en su momento lo teníamos a Ezequiel Villarroel y ahora lo está reemplazando Alejandro Martínez. Tenemos a Daniel Álvarez, en San Luis; a Sergio Morán, en Mendoza y San Juan, mientras que yo coordino el calendario de publicaciones. La página crece día a día. Siempre tenemos en mente la idea de hacer una antología con los poetas que han pasado por la página. Ojalá que eso en algún momento se pueda concretar. Ojalá podamos lograrlo y presentar esta antología en algunas de las provincias, porque creo que con eso vamos a culminar una hermosa etapa que venimos teniendo en este tiempo con respecto a la publicación y difusión de poesía del Noroeste Argentino y después de Cuyo también.
—¿Cómo están los preparativos para la Feria del Libro de Nueva Esperanza?
—Con respecto a la Feria de Nueva Esperanza estamos trabajando con el municipio y con las nuevas autoridades de la Municipalidad de la ciudad de Nueva Esperanza, para organizar la tercera edición de la Feria Municipal del Libro y la segunda edición del Festival de Poesía en los Bares. Ya hemos estado conversando con el secretario de Cultura de la municipalidad, el profesor Daniel Pavón, para conseguir los fondos para generar todos los proyectos, hacer el contacto con las editoriales, con los talleristas, con los libreros, con los poetas y escritores que van a ir a participar. Esto seguramente va a suceder una semana antes de la celebración de la fiesta de la ciudad, la semana antes al 18 de octubre de este año. Estamos muy esperanzados, tenemos muchas expectativas para concretar esta nueva feria y el segundo festival de poesía en los bares, que el año pasado hemos tenido una gran repercusión con mucho público, muchos poetas contentos por conocer Nueva Esperanza y por leer en los bares y la verdad que fue una sorpresa para nosotros y para aquellos que estuvieron presentes en los bares esa noche. Esperamos que este año sea mucho más grande la convocatoria y salga mucho mejor el evento.
*Fundador y director de Diario Cuarto Poder. Periodista, profesor de Letras e Historia y escritor.

Datos del autor

Rubén Aníbal Costilla nació en El Mojón, Departamento Pellegrini, Santiago del Estero, en 1980. Docente, licenciado en Educación General Básica I y II y escritor. Escribe poesía y cuentos. Textos suyos integran diversas antologías santiagueñas y argentinas, publicados por reconocidas editoriales.

Además, participa con sus trabajos en matutinos de su provincia y en revistas culturales. Recibió importantes distinciones por sus escritos en el ámbito provincial y nacional. Es letrista de canciones folclóricas, abarcando temáticas que se relacionan con problemáticas campesinas, sobre todo las referidas a los obreros forestales.

Sus poesías y cuentos revelan un profundo espíritu de percepción sobre el hombre, su yo y su medio, configurando una poética que contempla lo humano desde distintas posturas psicológicas y filosóficas. Ha publicado los libros de poesía “Mojonerías” (2008), “Historia del vacío” (2009) y “El árbol de los pájaros secos” (2011), entre otros.

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