Después de muchas idas y vueltas, Eduardo Salvio habría aceptado la propuesta de Boca y se convertiría en el segundo refuerzo del equipo de Gustavo Alfaro para la próxima temporada. Nicolás Burdisso y Daniel Angelici le dieron la buena noticia al entrenador, que ya trabaja con Alexis Mac Allister, la primera cara nueva.
El Toto había declarado públicamente hace algunas semanas que estaba muy a gusto en Benfica, donde tiene contrato hasta 2022. Sin embargo, los contactos por parte del director deportivo se hicieron más frecuentes y le torcieron el brazo. El futbolista de 29 años pidió algunas horas para responder, contempló el esfuerzo realizado por la institución de la Ribera y levantó el pulgar.
El mediocampista ofensivo surgido en la cantera de Lanús que también pasó por las filas del Atlético Madrid tuvo que atender una controversia familiar, puesto que su esposa tenía preferencia por la estadía en Europa, mientras que su madre habló con los medios y declaró que iba a hacer fuerza para que volviera a Argentina.
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Salvio había pedido como condición excluyente que el Xeneize le igualara el salario que percibe en Portugal para firmar y, si bien la oferta de Burdisso no llegó a ese número, se acercó lo suficiente para convertirlo en el jugador mejor pago del plantel boquense (el medio A Bola informó que ganará 3 millones de dólares anuales).
Resta definir si la transferencia del volante que disputó la última Copa del Mundo será a través de una compra o mediante un préstamo con cargo. Dato no menor es que Boca y Benfica tienen que resolver en los próximos días el futuro de Lisandro López(casualmente muy amigo de Salvio), quien fue cedido y tiene una opción de compra que vence el 30 de junio valuada en 4 millones de euros.
Ese será uno de los condicionantes de la transacción, aunque no el único. El club argentino pretende negociar a Cristian Pavón y ofrecería el 50 por ciento de su ficha como parte de pago. Lo que resta saber es si la entidad europea está interesada en el delantero cordobés.